lunes, 16 de junio de 2014

Hay que perder peso.

Aunque con la entrada anterior, en la que explicaba los beneficios de la prótesis bucal, daba por terminado este blog, ya que para mi era la solución definitiva, quiero explicarles algo más.

Tengo un amigo, deportista de toda la vida, que había sabido mantener su peso en unos niveles muy saludables; que debido a una enfermedad de la que nadie, ni siquiera los deportistas, pueden sentirse totalmente a salvo, había ganado algo de peso.

Por lo visto, a raíz de ello, aunque el no lo asociaba, comenzó a roncar. 

En nuestras conversaciones, yo le aconsejaba la prótesis que a mi me funciona tan bien, pero él era reacio a dormir con el aparato en la boca.

El caso es que la enfermedad de que estaba aquejado, aun sin haberla superado totalmente, si que le permite realizar una vida normal, con lo que ha vuelto a su rutina deportiva diaria y por consiguiente a perder parte del peso acumulado.

Pues bien, en nuestra última conversación, en la que salió a relucir su nuevo buen estado físico, me confirmó que ya no roncaba, con lo que ambos coincidimos en achacar sus ronquidos al incremento de volumen corporal.

Con esto lo que les quiero hacer ver es la importancia de mantenerse en unos niveles adecuado de masa corporal, tanto por lo que a la salud en general se refiere, como en lo que a los ronquidos tiene que ver.

Si aun no roncan, procuren no ganar peso. Si ya son roncadores, hagan todo lo posible por disminuirlo.

Saludos.